La leucemia/linfoma de células T del adulto (ATLL, por sus siglas en inglés) es un tipo de cáncer de la sangre que se origina en las células T del sistema inmunológico. Esta enfermedad es poco común y se asocia principalmente con el virus de la leucemia humana de células T tipo 1 (HTLV-1). Los síntomas de la ATLL pueden variar dependiendo de la etapa de la enfermedad y de la forma en que afecta al organismo.
En las etapas iniciales de la ATLL, los síntomas pueden ser sutiles y no específicos, lo que dificulta su diagnóstico temprano. Algunos de los síntomas más comunes incluyen fatiga persistente, pérdida de peso inexplicada, sudoración nocturna excesiva y fiebre intermitente. Estos síntomas pueden confundirse con otras enfermedades menos graves, lo que retrasa el diagnóstico.
A medida que la enfermedad progresa, los síntomas pueden volverse más evidentes y graves. Los pacientes con ATLL pueden experimentar linfadenopatía, que es la inflamación de los ganglios linfáticos, lo que puede causar la aparición de masas o bultos en el cuello, las axilas o la ingle. Además, pueden presentar hepatomegalia (aumento del tamaño del hígado) y esplenomegalia (aumento del tamaño del bazo), lo que puede provocar dolor abdominal y sensación de plenitud.
La ATLL también puede afectar la piel, causando erupciones cutáneas, úlceras o nódulos. Estos cambios en la piel pueden ser pruriginosos (con picazón) y pueden aparecer en diferentes partes del cuerpo. Otros síntomas cutáneos incluyen enrojecimiento, descamación y engrosamiento de la piel.
Además, la ATLL puede afectar otros órganos y sistemas del cuerpo. Los pacientes pueden experimentar síntomas respiratorios, como tos persistente, dificultad para respirar y dolor en el pecho. También pueden presentar síntomas neurológicos, como debilidad muscular, entumecimiento, dificultad para caminar y problemas de equilibrio. Estos síntomas pueden ser el resultado de la infiltración de células cancerosas en el sistema nervioso central.
En etapas avanzadas de la ATLL, los síntomas pueden empeorar y pueden aparecer complicaciones graves. Los pacientes pueden experimentar sangrado anormal, infecciones recurrentes, anemia, trombocitopenia (disminución de las plaquetas en la sangre) y neutropenia (disminución de los glóbulos blancos). Estas complicaciones pueden ser potencialmente mortales y requieren atención médica urgente.
En resumen, los síntomas de la leucemia/linfoma de células T del adulto pueden variar desde síntomas inespecíficos en las etapas iniciales hasta síntomas más graves y complicaciones en etapas avanzadas. Es importante tener en cuenta que estos síntomas no son exclusivos de la ATLL y pueden estar presentes en otras enfermedades, por lo que es fundamental consultar a un médico para obtener un diagnóstico adecuado.