La Atresia Biliar es una enfermedad rara y progresiva que afecta a los conductos biliares en recién nacidos, lo que conduce a la obstrucción del flujo de bilis desde el hígado hacia el intestino. Aunque los tratamientos actuales, como la cirugía de Kasai y el trasplante de hígado, han mejorado la calidad de vida y la supervivencia de los pacientes, aún existen desafíos significativos en el manejo de esta enfermedad.
En los últimos años, se han realizado avances importantes en la comprensión de la Atresia Biliar. Se ha identificado un posible componente genético en la enfermedad, lo que ha llevado a la investigación de terapias génicas y terapias dirigidas específicamente a las mutaciones genéticas asociadas con la enfermedad.
Además, se han realizado avances en el diagnóstico temprano de la Atresia Biliar. Se han desarrollado pruebas no invasivas, como la elastografía hepática y la resonancia magnética, que pueden ayudar a identificar la enfermedad en etapas más tempranas, lo que permite un tratamiento más oportuno y efectivo.
En cuanto al tratamiento, se están investigando nuevas estrategias terapéuticas, como el uso de células madre y la ingeniería de tejidos, para regenerar los conductos biliares dañados. También se están estudiando medicamentos que puedan mejorar la función hepática y reducir la inflamación en los pacientes con Atresia Biliar.
En resumen, los últimos avances en la Atresia Biliar se centran en la comprensión de los aspectos genéticos de la enfermedad, el diagnóstico temprano y el desarrollo de nuevas terapias que puedan mejorar la calidad de vida de los pacientes afectados. Estos avances brindan esperanza para un mejor manejo y tratamiento de esta enfermedad rara.