El Querubismo es una enfermedad genética rara que se caracteriza por el desarrollo excesivo de los huesos de la mandíbula y el cráneo, lo que da como resultado una apariencia facial distintiva. Aunque se cree que el Querubismo tiene un componente hereditario, la forma exacta de transmisión genética aún no se ha determinado por completo.
Se ha observado que el Querubismo tiende a afectar a varias generaciones de una misma familia, lo que sugiere que existe una predisposición genética. Sin embargo, no todos los miembros de una familia afectada desarrollarán necesariamente la enfermedad, lo que indica que otros factores, como las mutaciones genéticas adicionales o factores ambientales, también pueden desempeñar un papel en su aparición.
Los estudios genéticos han identificado mutaciones en el gen SH3BP2 como una causa común del Querubismo. Estas mutaciones pueden ser heredadas de uno o ambos padres, lo que aumenta el riesgo de desarrollar la enfermedad. Sin embargo, también se han reportado casos esporádicos de Querubismo, donde no hay antecedentes familiares de la enfermedad, lo que sugiere que pueden existir otros genes o factores involucrados en su desarrollo.
La herencia del Querubismo sigue un patrón autosómico dominante, lo que significa que un solo gen alterado es suficiente para que se manifieste la enfermedad. Si uno de los padres tiene Querubismo y transmite la mutación a su descendencia, existe un 50% de probabilidad de que el hijo también desarrolle la enfermedad. Sin embargo, también es posible que un individuo con Querubismo no lo transmita a sus hijos, ya que la penetrancia de la mutación puede variar.
Es importante destacar que el Querubismo es una enfermedad extremadamente rara, y la mayoría de las personas afectadas son diagnosticadas en la infancia o la adolescencia. Los síntomas pueden variar desde una leve deformidad facial hasta una afectación más severa que puede interferir con la función respiratoria y la alimentación. El tratamiento del Querubismo puede incluir cirugía reconstructiva para corregir las deformidades faciales y mejorar la función.
En resumen, el Querubismo tiene un componente hereditario, pero la forma exacta de transmisión genética aún no se comprende por completo. Se ha identificado una mutación en el gen SH3BP2 como una causa común de la enfermedad, pero también pueden estar involucrados otros genes y factores ambientales. La herencia del Querubismo sigue un patrón autosómico dominante, pero la penetrancia de la mutación puede variar. Es importante destacar que el Querubismo es una enfermedad extremadamente rara y que el tratamiento puede incluir cirugía reconstructiva.