La Ciguatera es una enfermedad causada por la intoxicación con ciguatoxinas, sustancias producidas por ciertas especies de algas marinas, que se acumulan en los tejidos de peces de arrecife y otros organismos marinos. Esta toxina es termoestable, lo que significa que no se destruye con el calor al cocinar los alimentos contaminados.
La ciguatera es común en áreas tropicales y subtropicales, especialmente en el Caribe y el Pacífico. Los síntomas de la ciguatera pueden variar, pero generalmente incluyen náuseas, vómitos, diarrea, dolor abdominal, debilidad muscular, picazón, dolor de cabeza y cambios en la sensación de temperatura. En casos más graves, puede causar dificultad para respirar, ritmo cardíaco irregular e incluso la muerte.
La intoxicación por ciguatera ocurre cuando los seres humanos consumen pescados y mariscos contaminados con ciguatoxinas. Los peces más comúnmente asociados con la ciguatera incluyen el pez loro, el pez ballesta, el pez napoleón, el pez ángel y el pez barracuda. Sin embargo, cualquier pez que se alimente de algas marinas contaminadas puede transmitir la ciguatera.
La prevención de la ciguatera implica evitar el consumo de peces y mariscos que puedan estar contaminados. Esto incluye evitar el consumo de pescados de arrecife capturados en áreas conocidas por tener ciguatera, así como evitar el consumo de pescados y mariscos de tamaño grande, ya que tienden a acumular mayores concentraciones de ciguatoxinas.
En conclusión, la ciguatera es una enfermedad causada por la ingestión de ciguatoxinas presentes en peces y mariscos contaminados. Los síntomas pueden variar y van desde náuseas y vómitos hasta dificultad para respirar y ritmo cardíaco irregular. La prevención se basa en evitar el consumo de pescados y mariscos potencialmente contaminados.