¿Cuáles son los síntomas de la Inmunodeficiencia Variable Común?

La Inmunodeficiencia Variable Común (IVC) es un trastorno del sistema inmunológico caracterizado por la disminución de la producción de anticuerpos, lo que lleva a una mayor susceptibilidad a infecciones recurrentes. Los síntomas de la IVC pueden variar ampliamente de una persona a otra, pero existen algunos signos comunes que pueden indicar la presencia de esta enfermedad.

Uno de los síntomas más comunes de la IVC es la presencia recurrente de infecciones respiratorias, como sinusitis, otitis, bronquitis y neumonía. Estas infecciones pueden ser más graves y duraderas de lo normal, y pueden requerir tratamientos prolongados con antibióticos para su resolución.

Otro síntoma frecuente de la IVC es la presencia de infecciones gastrointestinales recurrentes, como gastroenteritis y colitis. Estas infecciones pueden causar síntomas como diarrea crónica, dolor abdominal y pérdida de peso.

Además, las personas con IVC pueden experimentar infecciones cutáneas recurrentes, como celulitis, abscesos y foliculitis. Estas infecciones pueden ser difíciles de tratar y pueden requerir intervenciones quirúrgicas en algunos casos.

La presencia de infecciones recurrentes en diferentes partes del cuerpo puede llevar a la inflamación crónica, lo que puede manifestarse en síntomas como fatiga, fiebre baja y pérdida de apetito.

Además de las infecciones recurrentes, la IVC también puede estar asociada con otros síntomas, como alergias, artritis, enfermedades autoinmunes y trastornos del crecimiento.

Es importante destacar que los síntomas de la IVC pueden variar en intensidad y frecuencia entre los afectados. Algunas personas pueden experimentar síntomas leves y poco frecuentes, mientras que otras pueden tener síntomas más graves y recurrentes.

Si se sospecha de la presencia de IVC, es fundamental buscar atención médica para un diagnóstico adecuado. El médico puede realizar pruebas de laboratorio para evaluar la función del sistema inmunológico y determinar si existe una deficiencia de anticuerpos.

En resumen, los síntomas de la Inmunodeficiencia Variable Común pueden incluir infecciones respiratorias, gastrointestinales y cutáneas recurrentes, así como inflamación crónica y otros síntomas asociados. Si se presentan estos síntomas, es importante buscar atención médica para un diagnóstico y tratamiento adecuados.