¿Cuáles son los síntomas de la Neutropenia Cíclica?

La Neutropenia Cíclica es una enfermedad rara y hereditaria que afecta al sistema inmunológico, específicamente a los neutrófilos, que son un tipo de glóbulos blancos encargados de combatir las infecciones. Esta condición se caracteriza por la disminución periódica de los niveles de neutrófilos en la sangre, lo que aumenta el riesgo de infecciones recurrentes.

Los síntomas de la Neutropenia Cíclica pueden variar en cada persona y suelen manifestarse durante los episodios de disminución de neutrófilos. Estos episodios suelen durar alrededor de una semana y se repiten cada tres o cuatro semanas. Durante estos periodos, los pacientes pueden experimentar síntomas como fiebre, dolor de garganta, úlceras en la boca, infecciones respiratorias recurrentes, abscesos cutáneos y dolor abdominal.

La fiebre es uno de los síntomas más comunes de la Neutropenia Cíclica y puede ser un signo de infección. Además, el dolor de garganta y las úlceras en la boca pueden dificultar la alimentación y la ingesta de líquidos, lo que puede llevar a la deshidratación. Las infecciones respiratorias recurrentes, como sinusitis o bronquitis, son también frecuentes en estos pacientes debido a la disminución de la capacidad del sistema inmunológico para combatir los patógenos.

Los abscesos cutáneos, que son acumulaciones de pus en la piel, son otro síntoma característico de la Neutropenia Cíclica. Estos abscesos pueden aparecer en cualquier parte del cuerpo y suelen ser dolorosos. Además, los pacientes con esta enfermedad pueden experimentar dolor abdominal, que puede ser causado por infecciones en el tracto gastrointestinal.

Es importante destacar que los síntomas de la Neutropenia Cíclica pueden variar en intensidad y frecuencia en cada paciente. Algunas personas pueden tener episodios más leves y menos frecuentes, mientras que otras pueden experimentar síntomas más graves y recurrentes. Por esta razón, es fundamental que los pacientes sean evaluados y tratados por un médico especialista en inmunología para controlar la enfermedad y prevenir complicaciones.