La Dermatomiositis y Polimiositis no se consideran enfermedades hereditarias en el sentido de que no se transmiten directamente de padres a hijos a través de los genes. Sin embargo, existen ciertos factores genéticos que pueden aumentar la susceptibilidad a desarrollar estas enfermedades. Se cree que hay una combinación de factores genéticos y ambientales que contribuyen a su aparición. Es importante destacar que la mayoría de los casos de Dermatomiositis y Polimiositis ocurren de forma esporádica, sin antecedentes familiares. Por lo tanto, aunque puede haber una predisposición genética, no se puede afirmar que sean hereditarias en el sentido tradicional.
La Dermatomiositis y Polimiositis no se consideran trastornos hereditarios. Los casos de Dermatomiositis y Polimiositis en una misma familia son muy esporádicos y se consideran bastante raros.
A pesar de que en la mayoría de los casos la causa de una miopatía inflamatoria no está clara, numerosos estudios aseguran que ni la Dermatomiositis ni la Polimiositis son trastornos genéticos, aunque puede haber factores hereditarios que hacen que sea más o menos probable que se desarrolle una miopatía inflamatoria.
Actualmente los científicos investigan los factores que pueden desencadenar la Dermatomiositis y Polimiositis, como virus, ciertos medicamentos, vacunas e incluso el historial familiar. Esto nos brinda la esperanza de que en el futuro estas enfermedades puedan ser tratadas o quizás prevenidas por completo.