¿Cuáles son los síntomas de la Parálisis de Erb-Duchenne?

La Parálisis de Erb-Duchenne, también conocida como parálisis del plexo braquial, es una lesión nerviosa que afecta los nervios del brazo, específicamente el plexo braquial, que se encuentra en la región del cuello y los hombros. Esta condición generalmente ocurre durante el parto, cuando el bebé experimenta una tracción excesiva en los hombros durante el proceso de nacimiento.

Los síntomas de la Parálisis de Erb-Duchenne pueden variar en gravedad y pueden afectar uno o ambos brazos. Algunos de los síntomas más comunes incluyen:

1. Debilidad o parálisis del brazo: Uno de los síntomas más evidentes de la Parálisis de Erb-Duchenne es la debilidad o parálisis del brazo afectado. El bebé puede tener dificultad para mover o levantar el brazo, o puede tener una pérdida completa de movimiento en el mismo.

2. Pérdida de sensibilidad: Además de la debilidad o parálisis, el bebé también puede experimentar una pérdida de sensibilidad en el brazo afectado. Esto significa que puede tener dificultad para sentir el tacto, el calor o el frío en esa área.

3. Postura anormal del brazo: Otro síntoma común es la postura anormal del brazo afectado. El bebé puede mantener el brazo pegado al cuerpo y girado hacia adentro, en una posición conocida como "posición de mano de espera". Esto se debe a la debilidad de los músculos del hombro y el brazo.

4. Reflejos anormales: En algunos casos, los bebés con Parálisis de Erb-Duchenne pueden tener reflejos anormales en el brazo afectado. Por ejemplo, pueden tener un reflejo de Moro débil o ausente, que es un reflejo normal en los recién nacidos que implica extender los brazos y las piernas en respuesta a un estímulo repentino.

5. Dificultad para mover los dedos: Además de la debilidad en el brazo, el bebé también puede tener dificultad para mover los dedos. Esto puede afectar su capacidad para agarrar objetos o realizar movimientos finos con la mano.

Es importante destacar que la gravedad de los síntomas puede variar en cada caso. Algunos bebés pueden experimentar una recuperación completa de la función del brazo afectado, mientras que otros pueden tener secuelas a largo plazo. El tratamiento para la Parálisis de Erb-Duchenne puede incluir terapia física y ocupacional para fortalecer los músculos y mejorar la movilidad, así como cirugía en casos más graves.

En resumen, la Parálisis de Erb-Duchenne es una lesión nerviosa que afecta los nervios del brazo, causando debilidad o parálisis, pérdida de sensibilidad, postura anormal del brazo, reflejos anormales y dificultad para mover los dedos. Si se sospecha de esta condición, es importante buscar atención médica para un diagnóstico y tratamiento adecuados.