La Gastrosquisis es una malformación congénita que afecta al sistema digestivo del feto durante su desarrollo en el útero materno. Se caracteriza por la presencia de una abertura en la pared abdominal, generalmente a la derecha del ombligo, a través de la cual los órganos intestinales protruyen hacia el exterior del cuerpo.
Esta condición se produce debido a un fallo en el cierre adecuado de la pared abdominal durante las primeras etapas del desarrollo fetal. Aunque no se conoce la causa exacta de la Gastrosquisis, se cree que factores genéticos y ambientales pueden estar involucrados.
El diagnóstico de la Gastrosquisis generalmente se realiza mediante ecografía prenatal, donde se observa la presencia de los intestinos fuera del abdomen. Es importante realizar un diagnóstico temprano para poder planificar el tratamiento adecuado.
El tratamiento de la Gastrosquisis implica una cirugía correctiva inmediata después del nacimiento. Durante la cirugía, los intestinos se colocan nuevamente dentro del abdomen y se cierra la abertura en la pared abdominal. En algunos casos, puede ser necesario utilizar un recubrimiento especial para proteger los intestinos durante el proceso de cicatrización.
Después de la cirugía, los bebés con Gastrosquisis suelen requerir cuidados intensivos y seguimiento médico continuo. Pueden presentar complicaciones como dificultades para alimentarse, infecciones o problemas digestivos a largo plazo. Sin embargo, con un tratamiento adecuado y un seguimiento médico constante, muchos bebés con Gastrosquisis pueden tener un desarrollo saludable y llevar una vida normal.
En resumen, la Gastrosquisis es una malformación congénita del sistema digestivo que se caracteriza por una abertura en la pared abdominal a través de la cual los intestinos protruyen hacia el exterior del cuerpo. Se trata mediante cirugía correctiva y requiere cuidados médicos continuos. Con un diagnóstico temprano y un tratamiento adecuado, muchos bebés con Gastrosquisis pueden tener una buena calidad de vida.