La nefropatía por IgA, también conocida como enfermedad de Berger, es una enfermedad renal crónica que se caracteriza por la acumulación de inmunoglobulina A (IgA) en los riñones. Aunque no hay una forma definitiva de saber si tienes esta enfermedad sin una evaluación médica adecuada, hay algunos síntomas y pruebas que pueden indicar la presencia de nefropatía por IgA.
Uno de los síntomas más comunes de la nefropatía por IgA es la presencia de sangre en la orina, que puede ser visible o detectada solo en un análisis de orina. Otros síntomas pueden incluir dolor en el costado o en la espalda baja, hinchazón en las piernas o alrededor de los ojos, presión arterial alta y proteínas en la orina.
Si experimentas alguno de estos síntomas, es importante que consultes a un médico. El primer paso en el diagnóstico de la nefropatía por IgA es un análisis de orina para detectar la presencia de sangre y proteínas. También se pueden realizar pruebas de función renal, como la medición de la creatinina en sangre, para evaluar el funcionamiento de los riñones.
Si los resultados de estas pruebas sugieren la presencia de nefropatía por IgA, es posible que se realice una biopsia renal para confirmar el diagnóstico. Durante este procedimiento, se extrae una pequeña muestra de tejido renal para examinarla bajo un microscopio y determinar si hay acumulación de IgA.
Es importante destacar que solo un médico puede diagnosticar adecuadamente la nefropatía por IgA. Si sospechas que puedes tener esta enfermedad, te recomiendo que busques atención médica para obtener un diagnóstico preciso y recibir el tratamiento adecuado.