El queratocono es una enfermedad ocular progresiva que afecta la forma de la córnea, la capa transparente que cubre el ojo. A medida que el queratocono avanza, la córnea se adelgaza y se abomba hacia afuera en forma de cono, lo que provoca una distorsión en la visión. Los síntomas del queratocono pueden variar de leves a severos y pueden empeorar con el tiempo.
Uno de los síntomas más comunes del queratocono es la visión borrosa o distorsionada. Esto se debe a que la forma anormal de la córnea afecta la forma en que la luz se enfoca en la retina. Las personas con queratocono pueden experimentar una visión borrosa tanto de lejos como de cerca, lo que dificulta la lectura y la realización de tareas diarias.
Otro síntoma común del queratocono es la sensibilidad a la luz. Las personas con esta enfermedad pueden experimentar molestias o dolor en los ojos cuando están expuestas a la luz brillante. Esto puede hacer que sea difícil estar al aire libre en días soleados o en lugares con iluminación intensa.
Además de la visión borrosa y la sensibilidad a la luz, el queratocono también puede causar una disminución en la agudeza visual. Las personas con esta enfermedad pueden tener dificultades para ver con claridad incluso con el uso de anteojos o lentes de contacto. A medida que el queratocono progresa, puede ser necesario cambiar con frecuencia la prescripción de los anteojos o lentes de contacto para mantener una visión adecuada.
El queratocono también puede causar astigmatismo irregular, lo que significa que la córnea tiene diferentes curvaturas en diferentes áreas. Esto puede provocar una distorsión en la visión, como ver halos alrededor de las luces o ver las líneas rectas como curvas. El astigmatismo irregular causado por el queratocono puede ser difícil de corregir con anteojos o lentes de contacto regulares.
Además de los síntomas visuales, el queratocono también puede causar molestias o dolor en los ojos. Algunas personas pueden experimentar picazón, ardor o sensación de cuerpo extraño en los ojos debido a la forma anormal de la córnea. Estos síntomas pueden empeorar al frotarse los ojos, lo que debe evitarse ya que puede empeorar el queratocono.
En casos más avanzados de queratocono, la córnea puede volverse tan delgada que se produce una cicatrización. Esto puede causar una disminución adicional en la visión y aumentar la sensibilidad a la luz. En algunos casos, la córnea puede volverse tan abombada que se produce una perforación, lo que requiere atención médica urgente.
Es importante tener en cuenta que los síntomas del queratocono pueden variar de una persona a otra y pueden cambiar con el tiempo. Algunas personas pueden tener síntomas leves que no afectan significativamente su visión, mientras que otras pueden experimentar síntomas más severos que requieren tratamiento médico.
En conclusión, los síntomas del queratocono incluyen visión borrosa o distorsionada, sensibilidad a la luz, disminución de la agudeza visual, astigmatismo irregular y molestias o dolor en los ojos. Si experimentas alguno de estos síntomas, es importante que consultes a un oftalmólogo para un diagnóstico y tratamiento adecuados.