¿Cuáles son los síntomas del Síndrome de Legg-Calvé-Perthes?

El Síndrome de Legg-Calvé-Perthes es una enfermedad que afecta la cabeza del fémur, el hueso del muslo que se conecta a la cadera. Se caracteriza por la interrupción del flujo sanguíneo hacia la cabeza del fémur, lo que provoca la muerte del tejido óseo y su posterior colapso. A continuación, describiré los síntomas más comunes de esta enfermedad.

El síntoma principal del Síndrome de Legg-Calvé-Perthes es el dolor en la cadera o en la ingle. Este dolor puede ser leve al principio y empeorar con el tiempo. Los niños pueden cojear o tener dificultad para caminar debido al dolor. Además, pueden presentar rigidez en la cadera, lo que limita su rango de movimiento. Algunos niños pueden experimentar dolor en la rodilla o en la parte interna del muslo.

A medida que la enfermedad progresa, pueden aparecer otros síntomas. Uno de ellos es la atrofia muscular en la pierna afectada. Esto se debe a la falta de uso del músculo debido al dolor y la limitación de movimiento. La pierna puede parecer más delgada en comparación con la otra.

Otro síntoma común es la limitación de la movilidad de la cadera. Los niños pueden tener dificultad para realizar actividades que requieren movimientos de flexión, extensión o rotación de la cadera. Esto puede afectar su capacidad para caminar, correr o participar en actividades deportivas.

En algunos casos, el Síndrome de Legg-Calvé-Perthes puede causar una discrepancia en la longitud de las piernas. Esto se debe al colapso del tejido óseo en la cabeza del fémur, lo que puede provocar un acortamiento del hueso. Esta discrepancia puede ser evidente al observar al niño de pie o caminando.

Es importante destacar que los síntomas pueden variar en cada individuo y dependerán del grado de afectación de la cabeza del fémur. Algunos niños pueden experimentar síntomas leves y recuperarse por completo, mientras que otros pueden tener síntomas más graves y requerir tratamiento médico.

Si un niño presenta alguno de estos síntomas, es importante que sea evaluado por un médico. El diagnóstico del Síndrome de Legg-Calvé-Perthes se realiza mediante una combinación de historia clínica, examen físico y pruebas de imagen, como radiografías o resonancia magnética.

En resumen, el Síndrome de Legg-Calvé-Perthes se caracteriza por el dolor en la cadera, rigidez, limitación de movimiento, atrofia muscular y posiblemente una discrepancia en la longitud de las piernas. Si se sospecha esta enfermedad, es fundamental buscar atención médica para un diagnóstico adecuado y un plan de tratamiento adecuado.