La infiltración linfocítica cutánea de Jessner, también conocida como infiltración linfocítica benigna de la piel, es una enfermedad dermatológica poco común que se caracteriza por la presencia de una infiltración de linfocitos en la piel. Fue descrita por primera vez en 1953 por el dermatólogo alemán Wilhelm Jessner.
La enfermedad se presenta principalmente en adultos jóvenes, con una ligera predominancia en mujeres. Se manifiesta como una erupción cutánea crónica y recurrente, que generalmente afecta la cara, el cuello y la parte superior del tronco. Las lesiones son de color rojo o violáceo, y pueden ser planas o elevadas. A menudo, se observa una distribución simétrica de las lesiones.
Aunque la causa exacta de la infiltración linfocítica cutánea de Jessner no se conoce, se cree que tiene un origen autoinmune. Se ha sugerido que puede ser una respuesta inmunológica anormal a un agente desconocido, desencadenada por factores genéticos o ambientales.
El diagnóstico de esta enfermedad se basa en la apariencia clínica de las lesiones y en la confirmación histopatológica. En la biopsia de la piel afectada, se observa una infiltración densa de linfocitos en la dermis, con un patrón perivascular y perianexial. Además, se pueden encontrar otros cambios inflamatorios, como edema y fibrosis.
El curso clínico de la infiltración linfocítica cutánea de Jessner es crónico y recurrente. Las lesiones pueden aparecer y desaparecer espontáneamente, y suelen ser asintomáticas o causar solo una ligera picazón. Aunque la enfermedad no es grave, puede ser estéticamente preocupante para los pacientes.
El tratamiento de la infiltración linfocítica cutánea de Jessner es desafiante, ya que no existe una terapia curativa definitiva. Se han utilizado diversos enfoques terapéuticos, como corticosteroides tópicos, corticosteroides intralesionales, fototerapia y medicamentos inmunomoduladores. Sin embargo, la respuesta al tratamiento varía de un paciente a otro, y a menudo es necesario probar diferentes opciones antes de encontrar la más efectiva.
En resumen, la infiltración linfocítica cutánea de Jessner es una enfermedad dermatológica poco común que se caracteriza por la presencia de una infiltración de linfocitos en la piel. Aunque su causa exacta no se conoce, se cree que tiene un origen autoinmune. El diagnóstico se basa en la apariencia clínica y en la confirmación histopatológica. Aunque no es grave, puede ser estéticamente preocupante para los pacientes. El tratamiento es desafiante y varía de un paciente a otro.