El Déficit de Lipasa Ácida Lisosomal (DLAL) es una enfermedad genética rara que afecta el metabolismo de los lípidos en el cuerpo humano. Esta condición se caracteriza por la deficiencia o ausencia de una enzima llamada lipasa ácida lisosomal, la cual es responsable de descomponer los lípidos en las células.
Sin la presencia adecuada de esta enzima, los lípidos se acumulan en los lisosomas, que son orgánulos encargados de la degradación de moléculas. Esta acumulación de lípidos puede afectar diferentes tejidos y órganos, como el hígado, el bazo, los pulmones y el sistema nervioso.
Los síntomas del DLAL pueden variar ampliamente, dependiendo de la gravedad de la deficiencia enzimática y de los órganos afectados. Algunos de los síntomas comunes incluyen dolor abdominal, hepatomegalia (aumento del tamaño del hígado), esplenomegalia (aumento del tamaño del bazo), dificultad respiratoria y problemas neurológicos.
El DLAL se hereda de forma autosómica recesiva, lo que significa que ambos padres deben transmitir el gen defectuoso para que se desarrolle la enfermedad. El diagnóstico del DLAL se realiza a través de pruebas genéticas y análisis de los niveles de lipasa ácida lisosomal en sangre o tejidos.
Actualmente, no existe una cura para el DLAL, pero el tratamiento se centra en el manejo de los síntomas y en la mejora de la calidad de vida de los pacientes. Esto puede incluir terapias de reemplazo enzimático, que consisten en la administración de la enzima lipasa ácida lisosomal de forma artificial, así como la terapia de soporte para controlar los síntomas específicos de cada paciente.