El Síndrome de Maroteaux-Lamy, también conocido como mucopolisacaridosis tipo VI, es una enfermedad genética rara que afecta el metabolismo de los mucopolisacáridos. Esta condición es causada por una deficiencia en la enzima arilsulfatasa B, la cual es necesaria para descomponer los mucopolisacáridos en el cuerpo.
El síndrome de Maroteaux-Lamy es heredado de forma autosómica recesiva, lo que significa que ambos padres deben portar el gen defectuoso para que su hijo desarrolle la enfermedad. Cuando ambos padres son portadores, existe un 25% de probabilidad de que su hijo herede la enfermedad.
La deficiencia de la enzima arilsulfatasa B conduce a la acumulación de mucopolisacáridos en diferentes tejidos y órganos del cuerpo, lo que causa una amplia variedad de síntomas. Estos síntomas pueden incluir deformidades óseas, problemas respiratorios, trastornos del crecimiento, problemas cardíacos, afectación de las articulaciones, daño en los órganos internos y discapacidad intelectual.
La gravedad de los síntomas puede variar ampliamente de una persona a otra, incluso entre miembros de la misma familia. Esto se debe a que existen diferentes mutaciones genéticas que pueden causar el síndrome de Maroteaux-Lamy, y la gravedad de la enfermedad está influenciada por la cantidad y la actividad residual de la enzima arilsulfatasa B.
En resumen, el síndrome de Maroteaux-Lamy es causado por una deficiencia en la enzima arilsulfatasa B debido a mutaciones genéticas. Esta deficiencia conduce a la acumulación de mucopolisacáridos en el cuerpo, lo que resulta en una amplia gama de síntomas. La enfermedad es heredada de forma autosómica recesiva y su gravedad puede variar según la mutación genética específica presente en cada individuo.