La Paquidermoperiostosis, también conocida como enfermedad de Touraine-Solente-Golé, es una enfermedad rara que se caracteriza por el engrosamiento de la piel y los huesos, así como por el agrandamiento de las extremidades. Aunque se ha demostrado que existe una predisposición genética a esta enfermedad, no se considera hereditaria en el sentido tradicional.
La Paquidermoperiostosis es causada por mutaciones en el gen HPGD, que codifica una enzima llamada 15-hidroxi prostaglandina deshidrogenasa. Esta enzima juega un papel importante en la regulación de las prostaglandinas, que son moléculas involucradas en diversos procesos biológicos, como la inflamación y la respuesta inmune. Las mutaciones en el gen HPGD alteran la función de la enzima, lo que conduce a un desequilibrio en la producción de prostaglandinas y, en última instancia, al desarrollo de los síntomas de la enfermedad.
Aunque las mutaciones en el gen HPGD son responsables de la Paquidermoperiostosis, no se heredan de manera clásica como un rasgo autosómico dominante o recesivo. En la mayoría de los casos, las mutaciones ocurren de forma espontánea en el individuo afectado, sin que haya una historia familiar de la enfermedad. Esto se debe a que las mutaciones en el gen HPGD generalmente no se transmiten de padres a hijos.
Sin embargo, se ha observado que en algunos casos hay una predisposición genética a la enfermedad. Esto significa que ciertos individuos pueden tener una mayor probabilidad de desarrollar Paquidermoperiostosis si heredan ciertas variantes genéticas. Se han identificado varios polimorfismos genéticos asociados con un mayor riesgo de desarrollar la enfermedad, pero estos no son suficientes para causarla por sí solos. La presencia de estas variantes genéticas puede aumentar la susceptibilidad de una persona a la enfermedad, pero otros factores, como el entorno y los factores epigenéticos, también pueden desempeñar un papel importante en su desarrollo.
En resumen, aunque la Paquidermoperiostosis tiene una base genética, no se considera una enfermedad hereditaria en el sentido tradicional. Las mutaciones en el gen HPGD que causan la enfermedad generalmente ocurren de forma espontánea y no se transmiten de padres a hijos. Sin embargo, ciertos individuos pueden tener una predisposición genética a la enfermedad debido a la presencia de variantes genéticas asociadas con un mayor riesgo. Es importante destacar que la investigación sobre la Paquidermoperiostosis y su base genética aún está en curso, y se necesitan más estudios para comprender completamente los mecanismos subyacentes de la enfermedad.