La enfermedad celíaca refractaria (ECR) es una complicación poco común pero grave de la enfermedad celíaca, que se caracteriza por la persistencia de los síntomas y daño intestinal a pesar de seguir una dieta estricta libre de gluten. En otras palabras, a pesar de evitar el consumo de alimentos que contengan gluten, los síntomas y el daño en el intestino no mejoran.
La ECR se divide en dos subtipos: tipo I y tipo II. El tipo I es el más común y se caracteriza por la presencia de células anormales en el intestino delgado, llamadas linfocitos intraepiteliales aberrantes. Estas células pueden volverse cancerosas con el tiempo. Por otro lado, el tipo II es menos común y se caracteriza por la presencia de una proliferación anormal de células plasmáticas en el intestino delgado.
La causa exacta de la ECR aún no se conoce completamente, pero se cree que puede estar relacionada con factores genéticos y autoinmunes. Se ha observado que las personas con ECR tienen una mayor frecuencia de ciertos genes relacionados con la enfermedad celíaca. Además, el sistema inmunológico de estas personas puede estar alterado, lo que lleva a una respuesta inmune inapropiada contra el gluten y el propio tejido intestinal.
Los síntomas de la ECR pueden variar de una persona a otra, pero generalmente incluyen diarrea crónica, pérdida de peso, fatiga, anemia y dolor abdominal. También puede haber deficiencias nutricionales debido a la malabsorción de nutrientes en el intestino dañado.
El diagnóstico de la ECR se basa en la persistencia de los síntomas y el daño intestinal a pesar de la adherencia a una dieta libre de gluten durante al menos 12 meses. Se pueden realizar pruebas adicionales, como endoscopias y biopsias del intestino delgado, para confirmar el diagnóstico.
El tratamiento de la ECR puede ser desafiante, ya que no existe una cura definitiva. Se pueden utilizar medicamentos inmunosupresores para controlar la respuesta inmune y reducir la inflamación en el intestino. Además, se pueden recomendar cambios en la dieta, como evitar alimentos que puedan causar irritación adicional en el intestino.
En resumen, la enfermedad celíaca refractaria es una complicación grave de la enfermedad celíaca, en la cual los síntomas y el daño intestinal persisten a pesar de seguir una dieta libre de gluten. Se divide en dos subtipos y su causa exacta aún no se conoce completamente. El diagnóstico se basa en la persistencia de los síntomas y el daño intestinal, y el tratamiento puede incluir medicamentos y cambios en la dieta.