El Síndrome de Setleis, también conocido como Síndrome de la cara de león, es una enfermedad rara de origen genético que afecta principalmente a la apariencia facial de los individuos que la padecen. Fue descrito por primera vez en 1963 por el médico estadounidense William Setleis.
Este síndrome se caracteriza por presentar rasgos faciales distintivos, como cejas arqueadas, párpados caídos, nariz ancha y achatada, labio superior delgado y boca pequeña. Además, los afectados pueden presentar anomalías en los ojos, como ptosis (caída del párpado superior) y estrabismo (desviación de los ojos).
La causa exacta del Síndrome de Setleis aún no se conoce completamente, pero se cree que está relacionada con alteraciones en los genes responsables del desarrollo facial durante el embarazo. Se ha observado que esta enfermedad se hereda de manera autosómica dominante, lo que significa que un solo gen defectuoso de uno de los padres puede ser suficiente para que un individuo desarrolle el síndrome.
Aunque el Síndrome de Setleis no tiene cura, se pueden realizar tratamientos para mejorar la apariencia facial y corregir las anomalías oculares asociadas. Estos tratamientos pueden incluir cirugía reconstructiva, terapia ocupacional y apoyo psicológico.
A pesar de ser una enfermedad rara, el Síndrome de Setleis ha sido objeto de investigación y se han establecido redes de apoyo para las personas afectadas y sus familias. La conciencia sobre esta condición ha aumentado en los últimos años, lo que ha permitido una mejor comprensión y atención médica para aquellos que la padecen.