La viruela no es una enfermedad hereditaria. Se trata de una infección viral altamente contagiosa que se transmite de persona a persona a través de las gotas respiratorias expulsadas por alguien infectado. Aunque la viruela puede ser transmitida de padres a hijos durante el embarazo o el parto, esto no se considera una forma de herencia genética. La enfermedad se erradicó en 1980 gracias a la vacunación masiva, lo que significa que actualmente no existe riesgo de contraerla de forma natural.
La viruela no es una enfermedad hereditaria. Es una enfermedad infecciosa causada por el virus de la viruela, que se transmite de persona a persona a través de las gotas respiratorias expulsadas por alguien infectado. La transmisión puede ocurrir a través del contacto directo con las lesiones cutáneas de una persona infectada o a través de la inhalación de partículas virales en el aire.
Aunque la viruela puede afectar a personas de todas las edades, no se transmite de padres a hijos a través de la herencia genética. La enfermedad se propaga principalmente por la exposición a un individuo infectado o a objetos contaminados por el virus.
Es importante destacar que la viruela fue erradicada en 1980 gracias a una exitosa campaña de vacunación a nivel mundial. Desde entonces, ya no se considera una enfermedad endémica y no existen casos naturales de viruela en la población general.
En resumen, la viruela no es una enfermedad hereditaria, sino una enfermedad infecciosa que se transmite de persona a persona. Su erradicación ha sido uno de los mayores logros en la historia de la medicina, gracias a la vacunación masiva.