La faringitis estreptocócica es una infección bacteriana causada por la bacteria Streptococcus pyogenes. Para diagnosticar esta condición, se pueden utilizar diferentes métodos:
1. Historia clínica: El médico comenzará por realizar una entrevista al paciente para recopilar información sobre los síntomas presentes, como dolor de garganta, fiebre, dificultad para tragar, inflamación de los ganglios linfáticos, entre otros. También se indagará sobre antecedentes de exposición a personas con faringitis estreptocócica.
2. Examen físico: El médico examinará la garganta del paciente en busca de signos de inflamación, enrojecimiento, placas de pus o manchas blancas en las amígdalas. También puede palpar los ganglios linfáticos del cuello para evaluar su tamaño y sensibilidad.
3. Prueba rápida de detección de antígenos estreptocócicos: Se realiza un hisopo de la garganta para obtener una muestra de secreciones. Esta muestra se analiza en el consultorio médico utilizando una prueba rápida que detecta la presencia de antígenos estreptocócicos. Si el resultado es positivo, se confirma la presencia de la bacteria.
4. Cultivo de garganta: En algunos casos, especialmente si la prueba rápida es negativa pero el médico sospecha fuertemente de faringitis estreptocócica, se puede realizar un cultivo de garganta. Se toma una muestra similar a la anterior y se envía al laboratorio para su análisis. Los resultados pueden tardar uno o dos días en estar disponibles.
Es importante destacar que el diagnóstico de faringitis estreptocócica debe ser realizado por un profesional de la salud, ya que los síntomas pueden ser similares a los de otras infecciones virales de la garganta. Además, el tratamiento con antibióticos solo está indicado en caso de infección bacteriana, por lo que un diagnóstico preciso es fundamental para un manejo adecuado de la enfermedad.