Fatiga y pereza
Mayor sensibilidad al frío
Estreñimiento
Piel pálida y seca
Rostro hinchado
Uñas quebradizas
Pérdida del cabello
Aumento del tamaño de la lengua
Aumento de peso sin causa aparente
Dolor, sensibilidad y rigidez muscular
Dolor y rigidez de las articulaciones
Debilidad muscular
Sangrado menstrual excesivo o prolongado (menorragia)
Depresión
Fallas de la memoria