El trastorno de la personalidad por dependencia es un trastorno psicológico que se caracteriza por una excesiva necesidad de ser cuidado y protegido por los demás. Las personas que sufren este trastorno tienen una gran dificultad para tomar decisiones por sí mismas y tienden a buscar constantemente la aprobación y el apoyo de los demás.
La historia de este trastorno se remonta a principios del siglo XX, cuando el psicoanalista Sigmund Freud comenzó a estudiar los trastornos de la personalidad. Freud observó que algunas personas tenían una fuerte dependencia emocional de los demás y que esto les causaba un gran sufrimiento. Sin embargo, en aquel momento no se le dio mucha importancia a este fenómeno y no se consideró como un trastorno específico.
Fue en la década de 1960 cuando el psiquiatra estadounidense Robert L. Spitzer comenzó a investigar este tipo de trastorno de personalidad. Spitzer observó que algunas personas tenían una necesidad excesiva de ser cuidadas y protegidas por los demás, lo que les llevaba a tener dificultades en las relaciones interpersonales y a experimentar un gran temor al abandono.
En 1980, el trastorno de la personalidad por dependencia fue incluido por primera vez en el Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales (DSM-III) de la Asociación Americana de Psiquiatría. Desde entonces, ha sido reconocido como un trastorno de la personalidad y ha sido objeto de numerosos estudios e investigaciones.
El trastorno de la personalidad por dependencia se caracteriza por una serie de síntomas y comportamientos. Las personas que lo padecen suelen tener una baja autoestima y una gran necesidad de aprobación y atención de los demás. Además, tienden a evitar cualquier tipo de conflicto o confrontación y suelen ser sumisas y complacientes.
Estas personas tienen dificultades para tomar decisiones por sí mismas y suelen depender en exceso de los demás para resolver problemas o enfrentar situaciones difíciles. También tienen miedo al abandono y suelen hacer todo lo posible para evitarlo, incluso si eso significa renunciar a sus propias necesidades y deseos.
El trastorno de la personalidad por dependencia puede tener un impacto significativo en la vida de las personas que lo padecen. Pueden experimentar dificultades en las relaciones interpersonales, ya que su necesidad de ser cuidados y protegidos puede resultar agotadora para los demás. También pueden tener dificultades para desarrollar su propio sentido de identidad y para tomar decisiones importantes en su vida.
El tratamiento para el trastorno de la personalidad por dependencia generalmente incluye terapia psicoterapéutica, donde se trabaja en fortalecer la autoestima y la capacidad de tomar decisiones por sí mismos. También se pueden utilizar técnicas de terapia cognitivo-conductual para ayudar a las personas a cambiar sus patrones de pensamiento y comportamiento.
En resumen, el trastorno de la personalidad por dependencia es un trastorno psicológico que se caracteriza por una excesiva necesidad de ser cuidado y protegido por los demás. A lo largo de la historia, ha sido objeto de estudio e investigación, y se ha reconocido como un trastorno de la personalidad en el DSM. El tratamiento suele incluir terapia psicoterapéutica y técnicas de terapia cognitivo-conductual.