El Síndrome de Fraser, también conocido como Síndrome de Fraser-François, es una enfermedad genética rara que afecta principalmente el desarrollo de los ojos y los riñones. Fue descubierto por primera vez en 1962 por los doctores George Fraser y André François, quienes observaron una serie de características comunes en varios pacientes.
La historia de este síndrome comienza con el Dr. George Fraser, un oftalmólogo pediátrico que trabajaba en un hospital en Canadá. Durante su práctica clínica, notó que varios niños presentaban una combinación única de malformaciones oculares y renales. Estas malformaciones incluían cataratas congénitas, glaucoma, coloboma del iris y displasia renal.
El Dr. Fraser decidió investigar más a fondo estas anomalías y comenzó a colaborar con el Dr. André François, un nefrólogo pediátrico francés. Juntos, estudiaron a varios pacientes y recopilaron información sobre sus síntomas y características físicas. Descubrieron que estos pacientes compartían una serie de rasgos comunes, lo que llevó a la identificación de un nuevo síndrome.
En 1962, el Dr. Fraser y el Dr. François publicaron un artículo científico en el que describieron por primera vez el síndrome. Nombraron la enfermedad en honor a sus descubridores y desde entonces se conoce como el Síndrome de Fraser-François o simplemente Síndrome de Fraser.
A medida que se realizaban más investigaciones, se descubrió que el síndrome es causado por mutaciones en el gen FRAS1, que se encuentra en el cromosoma 4. Este gen juega un papel crucial en el desarrollo de los tejidos oculares y renales durante la etapa embrionaria. Las mutaciones en el gen FRAS1 alteran el desarrollo normal de estos tejidos, lo que resulta en las malformaciones características del síndrome.
El Síndrome de Fraser es una enfermedad hereditaria autosómica recesiva, lo que significa que ambos padres deben portar una copia mutada del gen para que su hijo desarrolle la enfermedad. Aunque es una enfermedad rara, se ha informado de casos en todo el mundo.
A lo largo de los años, se han realizado avances significativos en la comprensión y el manejo del Síndrome de Fraser. Los tratamientos se centran en abordar las complicaciones específicas de cada paciente, como las cataratas o el glaucoma. Además, se brinda apoyo y asesoramiento genético a las familias afectadas.
En resumen, el Síndrome de Fraser es una enfermedad genética rara que afecta el desarrollo de los ojos y los riñones. Fue descubierto por los doctores George Fraser y André François en 1962, quienes identificaron una serie de características comunes en varios pacientes. Aunque sigue siendo una enfermedad poco común, se han realizado avances significativos en su comprensión y manejo.