La degeneración frontotemporal (DFT) es una enfermedad neurodegenerativa que afecta principalmente a las regiones frontal y temporal del cerebro, causando cambios en la personalidad, el comportamiento y el lenguaje. Aunque no es tan conocida como otras enfermedades neurodegenerativas como el Alzheimer o el Parkinson, la DFT ha afectado a varios famosos a lo largo de los años.
Uno de los famosos más conocidos que ha sido diagnosticado con DFT es el actor y comediante Robin Williams. Williams, conocido por su talento cómico y su actuación en películas como "Patch Adams" y "Good Will Hunting", fue diagnosticado con DFT en los últimos años de su vida. La enfermedad afectó su capacidad para comunicarse y controlar sus emociones, lo que fue especialmente difícil para alguien cuya carrera se basaba en su habilidad para hacer reír a los demás.
Otro famoso afectado por la DFT es el músico y compositor canadiense Neil Young. Young reveló en una entrevista en 2012 que había sido diagnosticado con DFT, lo que afectó su capacidad para tocar la guitarra y componer música. A pesar de los desafíos que enfrenta debido a la enfermedad, Young ha seguido trabajando en su música y ha utilizado su plataforma para crear conciencia sobre la DFT y otras enfermedades neurodegenerativas.
El famoso físico británico Sir Terry Pratchett también fue diagnosticado con DFT en 2007. Pratchett, conocido por su serie de libros de fantasía "Discworld", se convirtió en un defensor de la investigación sobre la DFT y donó una gran cantidad de dinero para apoyar la investigación en esta área. Pratchett habló abiertamente sobre su experiencia con la enfermedad y escribió un documental titulado "Choosing to Die" que exploraba el tema de la eutanasia.
Otro famoso afectado por la DFT es el exjugador de fútbol americano Steve Gleason. Gleason, quien jugó como safety para los New Orleans Saints, fue diagnosticado con DFT en 2011 a la edad de 34 años. Desde entonces, ha utilizado su plataforma para crear conciencia sobre la enfermedad y ha establecido la Fundación Gleason para apoyar a las personas afectadas por la DFT y otras enfermedades neuromusculares.
Estos son solo algunos ejemplos de famosos que han sido afectados por la degeneración frontotemporal. La DFT es una enfermedad devastadora que no solo afecta a los pacientes, sino también a sus familias y seres queridos. Afortunadamente, la investigación sobre la DFT está en curso y se están realizando avances en el diagnóstico y tratamiento de la enfermedad. Con una mayor conciencia y apoyo, esperamos que en el futuro se encuentren mejores opciones de tratamiento y se pueda mejorar la calidad de vida de las personas afectadas por la DFT.