Después de 50 años de padecimiento con RLS, de severo a crónico durante los últimos 10/12 años ya casi puedo soportar las sensaciones, (varias), antes de tener que mover las piernas. Lo que más me afecta es la pérdida de habilidades cognitivas durante la actividad diaria normal, y la ocasional depresión "¡el más negro de los pensamientos!". Durante ataques particularmente severos.