Detectar el cáncer de piel a tiempo es fundamental para un tratamiento exitoso. Aunque solo un médico puede realizar un diagnóstico definitivo, hay ciertos signos y síntomas que puedes observar para determinar si debes buscar atención médica.
El cáncer de piel se manifiesta de diferentes formas, pero los signos más comunes son cambios en la apariencia de los lunares o la aparición de nuevas lesiones en la piel. Presta atención a cualquier lunar que cambie de tamaño, forma o color, o que presente bordes irregulares. También debes estar alerta si un lunar comienza a picar, sangrar o desarrolla costras.
Otro indicio de cáncer de piel es la aparición de una lesión que no cicatriza después de varias semanas. Si notas una herida que no mejora o que empeora con el tiempo, es importante que consultes a un médico.
Además, debes estar atento a cualquier protuberancia o bulto en la piel que crezca rápidamente. Si notas un crecimiento anormal en cualquier parte de tu cuerpo, especialmente en áreas expuestas al sol, es recomendable que lo revises con un especialista.
Es importante recordar que el cáncer de piel puede afectar a cualquier persona, independientemente de su tono de piel. Si tienes piel clara, ojos claros, cabello rubio o rojo, o si tienes antecedentes familiares de cáncer de piel, es posible que tengas un mayor riesgo de desarrollar esta enfermedad.
Si observas alguno de estos signos o síntomas, no entres en pánico, pero tampoco los ignores. Programa una cita con un dermatólogo para que evalúe tu piel de manera adecuada. El médico realizará un examen físico y, si es necesario, realizará una biopsia para confirmar o descartar el cáncer de piel.
Recuerda que la detección temprana es clave para un tratamiento exitoso. No dudes en buscar atención médica si tienes alguna preocupación sobre tu piel.