La Polimialgia Reumática (PMR) es una enfermedad inflamatoria crónica que afecta principalmente a personas mayores de 50 años. Aunque no existe una dieta específica para tratar la PMR, llevar una alimentación saludable puede contribuir a mejorar la calidad de vida de las personas que la padecen.
En primer lugar, es importante mantener un peso adecuado, ya que el exceso de peso puede aumentar la carga en las articulaciones y empeorar los síntomas de la PMR. Para lograrlo, se recomienda seguir una dieta equilibrada, rica en frutas, verduras, cereales integrales y proteínas magras.
Además, se sugiere limitar el consumo de alimentos procesados, ricos en grasas saturadas y azúcares añadidos, ya que pueden promover la inflamación en el cuerpo. En su lugar, se deben incluir alimentos antiinflamatorios, como pescados grasos (salmón, sardinas), nueces, semillas y aceite de oliva.
Asimismo, es fundamental mantener una buena hidratación, bebiendo suficiente agua a lo largo del día. Esto ayuda a mantener las articulaciones lubricadas y favorece la eliminación de toxinas del cuerpo.
Por otro lado, se recomienda evitar el consumo excesivo de alcohol y tabaco, ya que pueden empeorar los síntomas de la PMR y afectar la respuesta al tratamiento.
En resumen, aunque no existe una dieta específica para la PMR, llevar una alimentación saludable, mantener un peso adecuado, incluir alimentos antiinflamatorios y evitar el consumo de alcohol y tabaco puede contribuir a mejorar la calidad de vida de las personas con esta enfermedad. Es importante consultar con un médico o nutricionista para recibir una orientación personalizada.