Hay mucho debate sobre este tema. El consenso hasta ahora parece ser: hereditario, impacto/lesión, trastornos del tejido conectivo, y presiones en el líquido cefalorraquídeo y la forma en que el cuerpo enfrenta los cambios en él. Personalmente, no lo tengo en mi familia y no tengo trastornos del tejido conectivo. Tiendo a caer a menudo incluso en la infancia, pero de alguna manera nada parece destacar en particular.