En el caso de los niños, el consejo es para sus padres/tutores/encargados, y este es que deben ser constantes y perseverantes con el tratamiento que les indiquen, es un proceso lento, pero se observan mejorías importantes cuando se es realizado de manera correcta.
En adultos el consejo es el mismo, con la diferencia de que al ser personas más autónomas nos puede o ser más fácil ser constantes con el tratamiento, o por el contrario abandonarlo rápidamente si no tenemos la suficiente motivación. También es importante no solo ver la parte metabólica de nuestra enfermedad, sino que vernos con un traumatólogo que nos ayude a estar mejor de nuestras extremidades, lo mismo con la dentadura, y no menos importante, cuidar nuestra alimentación.