Piel delgada, suave y usualmente transparentosa
Articulaciones con un rango de movimiento mayor al usual (hombros, codos, rodillas, tobillos, dedos, muñecas, etc.)
Luxaciones o torceduras frecuentes
Dolores articulares y diferentes a los musculares (tendones, ligamentos) frecuentes
Juanetes o hueso de los dedos gordos del pie con tendencia a salir de su lugar
Pie plano o arco que tiene a caerse con el paso del día, poco soporte.