El síntoma más notorio es el dolor. En varias partes del cuerpo, un día puede dolerte los hombros, al rato solo las caderas y al otro día los brazos. Cuando ese dolor no pasa con analgésicos comunes, y lleva mucho tiempo de parecerlo, y tiene además otros síntomas que no se relacionan, y a los que ningún médico encontró diagnóstico en ninguna prueba de laboratorio o imagen, deberían consultar con un reumatologo.